Los brotes de girasol es una planta originaria de América, pero que gracias a sus atributos hoy en día se puede encontrar en casi cualquier parte del mundo. 

Si bien es muy requerida para adornar con sus bellas flores los jardines de los hogares, también es cierto que sus semillas son muy preciadas por su alto valor nutricional.

Como toda planta germinada, los brotes de girasol aportan una cantidad de nutrientes muy superior al equivalente de la planta adulta: son energía viva para el organismo. A su vez, son fuente de proteína vegetal con aminoácidos esenciales indispensables para el organismo, con altos porcentajes de fibra y apenas aportan sal o azúcares. Estas son una rica fuente en proteínas, grasas insaturadas, vitaminas B y E, calcio, hierro, fósforo, potasio y magnesio.